Pues este fin de semana pasado he tenido visita en Den Haag. Aprovechando que el día 1 de noviembre es fiesta en España, vinieron a verme Carol, mi hermana, Ainhoa y Kike. No estaban todos, pero los que han venido son importantes. Así que estaba esperando esta visita con mucha ilusión.
Llegaron el viernes por la noche, ya algo tarde, así que fuimos directamente a casa a descansar y, sobre todo, a charlar después de unos meses sin vernos. El sábado tuvimos la oportunidad de ir a una feria gótico-medieval que se celebraba aquí. La feria se celebraba en un recinto cerrado, con multitud de puestos, conciertos e incluso se daban clases de lucha de espadas. Una lástima que el sitio fuera tan oscuro que no era muy fácil hacer fotos sin un flash adecuado. Era curioso ver alguna gente disfrazada de góticos, verdaderos personajes salidos de un cuento o de un concierto de Cradle of Fifth o Nightwish. E incluso se podían ver padres con sus hijos, todos ellos disfrazados. Después de unas horas allí nos saturamos un poco de tanto cuero, espadas, etc. y nos fuimos a visitar el centro de La Haya, donde estuvimos hasta medianoche paseando, comiendo y bebiendo.
Gothic Beurs
Es difícil hacer una visita a Holanda y no ver Amsterdam, así que el domingo lo pasamos allí. No es una ciudad que me acabe de gustar del todo, tiene un algo que no acaba de cuadrarme y me da una sensación extraña. Además, estaba repleta de turistas, la mayor parte de ellos españoles; supongo que aprovechando también el puente. Por eso no me gustó tanto como las otras visitas que hicimos. Dimos una vuelta por el centro, comimos en un «intento» de restaurante argentino y acabamos por el Barrio Rojo, viendo la fauna del lugar (y no me refiero solo a las profesionales del sexo). Volvimos pronto a casa para cenar, cansados de todo el día, y pensando que yo al día siguiente trabajaba y teníamos que descansar.
Amsterdam
El lunes por la tarde quedamos en Delft, una pequeña ciudad próxima a Den Haag que me pareció encantadora. La plaza principal es una de las más bonitas que he visto, y da gusto pasear por sus canales y calles, con algunas iglesias impresionantes para una ciudad tan pequeña. La tarde no dio para mucho, porque después del cambio de hora, se hace noche enseguida y a eso de las 19 el ambiente nos invitaba a volver. Así que regresamos a casa para compartir la última noche tomando unas cervezas y jugando a las pelis.
Canal en Delft
La visita por supuesto, ha estado genial, y estos días han dado bastante de sí. Quizás podría haber hecho mejor tiempo, pero también podría haber sido mucho peor. Y lo importante era la compañía, tener a mi gente en mi casa por unos días.
Noche de Halloween
A cuidarse…
Carpe Diem 